Karencita



Karen era una compañera universitaria que alcance luego que ella se atrasara un par de años por uno u otro ramo que no pudo aprobar, si no está historia no tendría efecto. Ella pasaba piola, no era la chica popular, pero tenía personalidad eso me atraía, junto con lo que la caracterizaba físicamente era quizá una de las alumnas más bajitas de la U, 1,50 m quizá, era delgada y lucía siempre una linda cola.

Por esa cosa del destino nos toco ser parte de un grupo de trabajo allí hicimos "migas" y resulto que congeniamos muy bien entre mezclando miradas de coqueteo, por aquellos años era muy popular el famoso msn, allí conversábamos por las noches sobre los estudios y otras cosas y no se como llegamos a tocar temas sexuales, de nuestras experiencias pasadas, gustos etc, que daría por rescatar dichas conversaciones y leerlas nuevamente, por aquellos días yo arrendaba un cuarto en una casa era pequeñita pero acogedora a mi me gustaba, ella en otra casa tenía un dormitorio quizá el doble del mío, claro que la dueña de casa era más estricta en cuanto a recibir visitas comparada con la mía que me daba completa libertad sin abusar de ella.


Fue en una de las visitas a su dormitorio al cual pude llegar gracias a la ausencia de la dueña de casa, todo tranquilo todo normal me senté en el borde de la cama y fue ella quien se me abalanzo sobre  mi atacándome a besos la verdad fuera quién fuera era una carrera ganada, nos pegamos en tremendos besos no tarde nada en tener una erección y hacerlo notar frotándome  contra su entre pierna sobre las ropas no era mi interés hasta ese momento tener un noviazgo ni nada solo pasarlo bien no fuimos más allá en cualquier momento llegaba la dueña de casa o alguna de sus compañeras de casa que vivían en las piezas contiguas, nos reíamos cómplices luego en clases o en los pasillos de la U, me imagino nadie supo.


Siguieron las juntas a "estudiar" y no faltaba la sesión de besos pero ella no quería ir más allá, el típico temor de mina, pero conversando por msn me confesaba que tenia mucho tiempo sin sexo y temía que le doliera, al parecer había tasado mi tamaño que no va más allá de lo normal, en esas conversaciones ella me dejo en claro cierto gustito por el sexo oral, ese seria mi próxima jugada, en una de sus visitas a mi pieza luego de estudiar algo, nos enfrascamos sobre la cama en un atado de besos calientes y muy húmedos, con ropa me monto y comenzó a frotarse contra mi sexo alineado a mi cuerpo completamente duro, cansada de aquello cayo a mi lado y su boca fue mía mientras mis manos arrasaron con su cuerpo que se retorcía de placer a su paso, llegue a su sexo aún sobre las ropas, como gimió, ella alcanzo su mano y acaricio mi sexo que estaba que rompía mis ropas, me agarro con fuerzas, se notaba su deseo por tocar, le abrí paso desabroche mi pantalón y pudo meter su mano, su pequeña mano que me hizo sentir aún más grande, "chupamelo" le pedí entre un beso y otro, ella me miro y luego miro mi sexo mordiendo su labio inferior se acomodo sobre la cama arrodillada y se lo llevo a la boca, si que era una experta, buena succión, presión, humedad, juego con la mano y sin ella, yo me apretaba los dientes por no gemir muy fuerte y delatar lo que allí sucedía, por momentos se detenía para tomar un poco de aire, acomodarse el cabello, yo lograba acariciar su espalda hasta su cola, se acomodo de tal forma que mis dedos lograban llegar a su sexo sobre sus ropas.

Luego de un pequeño movimiento note que su pantalón cedió mi mano pudo entrar por detrás directamente hasta la entrada de su sexo, que estaba completamente mojado, mi dedo medio entro suavemente y sentí otro gemido, ella me miro de reojo sin soltar mi sexo, su lengua continuaba estimulandome, me acomodé y me baje los pantalones a la rodilla ella me ayudo y luego continuo con su tarea sus deditos acariciaban mis bolas y su boca cada vez más profunda me hacia vibrar y colocarme cada vez más tenso, lentamente logre bajar sus pantalones y mis dedos jugaban en su sexo y por momentos en su ano, que delicia, acomódate sobre mi, le dije indicándole que hiciéramos el 69, ella se bajo los pantalones y se acomodó sobre mi, su sexo mojado por fin era presa de mi boca, me hundí en el, busque con la punta de mi lengua su clítoris, su colita saltaba cada vez que lo rosaba algo incómodos con los pantalones a medias los míos me los quite, y los de ella con mis manos los deje a un lado, de pronto sentimos que alguien entro en el pasillo no era tan tarde cerca de las 22 hrs, reconocí la voz de la dueña de casa pero me sentí seguro nada pasaría, pero ella se preocupo me dejo de lado aunque yo trate de seguir en lo mio se salio de sobre mi y se sentó en la cama arreglando su pelo, la calme y la besé...quieres seguir le dije arrastrando su mano a mi sexo, me miro y no se resistió se puso de pie y se arrodillo frente a mi par seguir en su tarea esta vez lejos de mis manos.


¿Quieres que acabe en tu boca? susurre, ella me miro y me contra pregunto ¿qué quieres hacer? hagamoslo rapidito respondí, alcance un preservativo y se lo mostré...ya pero despacito, me causo gracia eso pero no reí, me coloque el condón ella no quito la vista en ningún segundo totalmente extendido el condón hacia lucirme enorme, me recosté en la cama y ella ávida se acomodo sobre mi con la colita parada, sus piernas abiertas, mi sexo duro buscando su sexo, no fue necesario ayuda, solito encontró la entrada a su sexo y lentamente ella estuvo a cargo de la profundidad, velocidad y frecuencia yo me quede allí estoico, duro para ella, primero sentí la puntita entrando en su cuerpo, luego un poco más siempre subiendo y bajando, metí mis manos bajo sus ropas acariciando sus pechos, me moría de ganas de chupar sus pezones, a la mierda la ropa le quite todo y fueron míos, yo igual quede desnudo, bese sus pezones con furia, ella me miraba desesperada apretando su boca evitando dejar escapar algún grito o gemido, su respiración era profunda y agitada, cada vez mi sexo se sentía mas y mas dentro de ella, finalmente me sentí completo dentro y mojado hasta las bolas,


Creo que sentí un largo orgasmo de ella, luego vino un relajo de su cuerpo cayendo sobre mi pecho, tenemos que ir a un motel susurre en su oído, siii respondió a penas, me acomode sobre ella sin salirme me dejo, bombeando de vez en cuando ponía sus manitos en mis caderas para frenar mis embistes, quede de lado nuevamente y movía mis caderas haciendo que mi sexo entrara en ella, luego nuevamente quedo sobre mi, y como que se reactivo y me agarró con fuerzas en pocos minutos me tenia a punto de acabar y así sucedió, en tremendo orgasmo apretando su cuerpo contra el mio buscando ese lugar más profundo y cálido, se salio y se recostó a mi lado....nos tapamos con un cubre cama y descansamos un rato, Me tengo que ir me dijo....te quieres ir? pregunte....y la besé...se fue pasada las 12 de la noche, luego de una larga sesión de sexo oral para ella y de ella para mí de volver a cabalgar, de sudar, de ahogar gemidos, de desordenar la cama, de su olor en mi sexo, volvimos a hacerlo cada vez que podíamos, fuimos a un motel de la ciudad una historia aparte y genial...

Comentarios